A pesar de las promesas del gobierno municipal y los desembolsos de altas sumas monetarias para refaccionar la vivienda, los plazos de finalización de obra se habrían vencido y la localidad sigue sin tener una Comisaria de la Mujer.
El gobierno municipal encabezado por Darío Kubar sigue sin inaugurar la Comisaria de la Mujer en General Rodríguez, aunque hace dos años que viene anunciando la puesta en valor de la vivienda, curiosamente cada vez que se acerca la fecha del 8 de marzo, día en el que se conmemora el Día Internacional de la Mujer.
La casa en la que tendría que estar funcionando, ubicada sobre la calle Belgrano al 1088, fue adquirida durante la gestión de Juan Pablo Anghileri y su escrituración fue firmada hace aproximadamente unos dos años, sin embargo hasta la actualidad la vivienda no ha entrado en funcionamiento pese a los dos decretos firmados por el intendente, mediante el cual se contrataron empresas para la refacción del inmueble.
Entre ambas contrataciones, una realizada en marzo del 2017 y otra en octubre del mismo año, el municipio ha desembolsado casi un millón de pesos y aunque la última contratación establece un plazo de finalización de obra de 30 días la Comisaria de la Mujer sigue sin entrar en funciones.
Cada año al acercarse el 8 de marzo tanto el intendente Darío Kubar como su esposa y distintos funcionarios se fotografían junto a la vivienda anunciando su pronta puesta en marcha e inclusive llevan adelante campañas en contra de la violencia de genero (la gestión tiene varios casos denunciados públicamente de funcionarios que han ejercido violencia de genero), pero a pesar de todas las promesas nada hay en concreto. Ante las permanentes demoras surgen permanentemente sospechas sobre el destino de los fondos destinados a la reparación de la vivienda.
La demora en la activación de la Comisaria de la Mujer respondería a la falta de nombramientos de personal por parte del gobierno de la Provincia de buenos Aires, a cargo de María Eugenia Vidal. A ello, y la falta de interés ante una problemática que afecta duramente a las rodriguenses, se suma la falta de la Casa de Abrigo para víctimas de la violencia de género, cuyo edificio sufrió durante el año pasado un feroz incendio que dejo el lugar en ruinas.
En esa ocasión el intendente Kubar, junto a su esposa Natalia Ruiz, salieron rápidamente a culpabilizar, con algunos gestos de llanto, a los sectores políticos de la oposición como responsables, sin embargo hasta el momento no han aportado ninguna prueba que lo demuestre, y el lugar nunca se recuperó pese a las promesas.
El sumum del ridículo se produjo cuando desde el kubismo salieron a anunciar la implementación de una nueva casa de abrigo brindando la dirección del inmueble, lo que manifestaría una absoluta incomprensión de las problemáticas de género, ya que la dirección de este tipo de viviendas no debe ser publica, precisamente para proteger la integridad de las mujeres que atraviesan situaciones de violencia de genero.
