Luego de haber sufrido varios ataques del gobierno de Darío Kubar, el clásico programa rodriguense, próximo a cumplir 16 años de emisión, recibió el reconocimiento del Concejo Deliberante.
El proyecto para declarar de interés social, cultural y municipal al programa de radio “Buenas Migas” de FM El Vecinal, fue presentado y aprobado por unanimidad por todos los concejales presentes en la última sesión ordinaria del HCD.
El programa, que está próximo a cumplir 16 años al aire, es conducido por Sebastián Piccardo, dueño de FM El Vecinal, en conjunto con Fernando Pérez, Paula García, Alejandro Krewski y Raúl Nieto.
Una buena noticia, por la que picardo se expresó realmente emocionado, ya que este año sufriría en carne propia los embates de las políticas de la Alianza Cambiemos en General Rodríguez.
El 24 de enero la radio fue clausurada por más de 15 días en un acto claro de censura por parte del gobierno de Darío Kubar. Los argumentos presentados por el municipio fueron escasos para validar el acto, que según ellos no atentaba contra la libertad de expresión.
Pasada la clausura, el mismo día de la reapertura de la radio, por la mañana en el horario de programa “Buenas Migas” un camión fue dejado estacionado en la puerta de la radio, impidiendo la visión de la gente del programa hacia la calle y de los seguidores del programa que pasaban a saludar y a festejar la reapertura. Más de una semana pasaría para que el camión fuera retirado.
Desde el lunes 13 de marzo, la gran ventana que posee la radio, la cual conecta con la calle se vio obstruida por unas placas de madera que fueron colocadas rodeando a todo el edificio. Según trascendió entonces, el municipio habría intimado a los dueños de la propiedad para que las coloquen aduciendo problemas de inseguridad.
El jueves 6 de julio Piccardo denunciaba en “Buenas Migas” una nueva persecución política. En este caso manifestaba que gente ligada al gobierno de Kubar sacó del mercado el semanario “El Vecinal” comprando la totalidad de los ejemplares expendidos en el 80 por ciento de los puntos de venta, y que los comercios estarían siendo extorsionados para que no vendan más el semanario y que dejen de publicitar en el mismo.
El 11 de agosto, por segunda vez, sacarían del aire la Radio El Vecinal. A diferencia de la anterior oportunidad en que fue el mismo gobierno municipal el ejecutor, fue el ENACOM el que llevó adelante la tarea. La excusa para arremeter contra el medio de comunicación local había sido la “invasión del espacio aéreo”.