Ayer lunes 17 de octubre, en el marco de las movilizaciones en distintos puntos del país, la Corriente Federal de los Trabajadores, junto a la CTA y el frente sindical, marchó a Plaza de Mayo por el día de la lealtad peronista, pero fundamentalmente en apoyo de una propuesta política que ayude a salir de la crisis actual con medidas de fondo y sin vulnerar (más todavía) a los sectores populares.
Heber Ríos, Secretario General del sindicato de Atilra Seccional General Rodríguez, presente en la movilización manifestó en comunicación con Radio Gráfica que: “estamos acá conmemorando este 17 de octubre que creo que se ve acompañado y respaldado por las trabajadores y los trabajadores principalmente a la compañera Cristina Fernández de Kirchner, a este intento de magnicidio, pero también reivindicando los valores primordiales del movimiento obrero, bancando a nuestra líder, a la que nosotros consideramos en particular que es la única que puede revertir la situación que estamos atravesando todos los argentinos y todas las argentinas, principalmente todos aquellos que vivimos del mundo del trabajo”.
En relación a este 17 de octubre, Heber Ríos expresó que tienen esperanza ya que “muchos compañeros y compañeras se ven reflejados por ese modelo pergeñado por Néstor, continuado por Cristina y creo que es el modelo a seguir para poder sacar a todos los argentinos y argentinas de esta situación delicada que estamos atravesando”.
Al respecto de esto, el representante de la Federación Gráfica Bonaerense, Héctor «Gringo» Amichetti, afirmó que «El Gobierno ha quedado entrampado en las urgencias. Los condicionamientos del acuerdo con el Fondo Monetario, la falta de reservas en el Banco Central. Hay que empezar a enfrentar esas urgencias con políticas más de fondo. Tener una actitud muy firme en el control y planificación de la economía, de lo contrario los que marcan el rumbo son los grupos económicos, multinacionales que no quieren ningún control y un sistema financiero que promueve la fuga de las riquezas. Es necesario un plan propio para evitar esos condicionamientos».
En este sentido, La Corriente Federal publicó un documento al que adhirieron más de 100 organizaciones sindicales, en el que se explican una serie de propuestas para enfrentar la situación actual. Entre ellas se destacan la revalorización del estado como herramienta fundamental de control y planificación de la economía, frente la situación actual de anomia y desregulación que impulsan los sectores concentrados privados. En segundo lugar, el control de la inflación a través de mecanismos que no perjudiquen el salario de los trabajadores (cabe aclarar que existen métodos antiinflacionarios con severos efectos sobre los ingresos y la actividad). En tercer lugar, priorizar las políticas de generación y fomento del empleo digno, con principal acento en esto último ya que en este último año se registró una recuperación del empleo total, pero con pérdida de salario real y grandes tasas de informalidad.
Las demás propuestas apuntan a establecer controles al sistema financiero que funciona como un espacio de presión muy efectivo sobre el gobierno a través de la fuga de divisas y la especulación sobre el precio del dólar. Una reforma tributaria progresista también es mencionada, sobre todo que tenga en cuenta lo que han dejado de pagar los capitales privados en los últimos 7 años.
También se hace referencia al estricto control del comercio exterior, dada la altísima tasa de fuga de divisas, contrabando, pero también maniobras legales que obligan a la población a pagar precios internacionales por productos locales.
Los últimos dos puntos del documento colectivo hacen referencia a la reforma integral del sistema judicial y un sistema de medios democrático.
Como no podía ser de otra manera, la Plaza de Mayo se llenó de gente a varias cuadras a la redonda, en una clara manifestación de los sectores trabajadores de no renunciar a la lucha en este contexto complejo de la economía y el gobierno.
