El miércoles 31 de julio se desarrolló en la seccional General Rodríguez de Atilra una asamblea en la que las trabajadoras y los trabajadores de la industria lechera aprobaron un aumento salarial del 25% negociado por la Comisión Paritaria Nacional con las cámaras empresarias del sector.
El porcentaje de recomposición logrado en la mesa paritaria, que debe ser refrendado por las bases en cada una de las seccionales del país antes de ser aceptado por el gremio en su conjunto, y posteriormente homologado por la Secretaría de Trabajo, corresponde al primer semestre del año 2019.
El mismo consta de un incremento del 25% distribuido en un 12% en julio sobre el básico de abril a través de una suma no remunerativa, un 18,5% en septiembre, también sobre el mismo básico y en forma no remunerativa y, finalmente, hasta alcanzar el 25% en noviembre trasladado al básico y en el adicional remunerativo de abril del 2019.
El Secretario Adjunto de Atilra Rodríguez fue el encargado de leer el texto en el cual la Comisión Nacional de Atilra informó oficialmente a cada seccional los resultados de las negociaciones. Alli se detalló que fue primordial en las discusiones la centralidad de mantener los puestos de trabajo y lograr la mejor actualización salarial posible frente a las “políticas económicas que están siendo aplicadas por el actual gobierno”.
Luego Heber Ríos, leyó el orden del día, pero antes de la votación realizó un breve paneo de la situación de los trabajadores lácteos y de la industria lechera en el país.
“Si tenemos que hacer una comparación de las diferentes negociaciones paritarias llevadas adelante en los últimos años, el pasado 2018 se puede considerar que fue lo menos malo, comparado con la no negociación del año 2017 donde se perdió un 25% de nuestro poder adquisitivo. El año pasado se acordó un incremento salarial de 45,63%, y la inflación fue de 48,4%, lo que implica en la sumatoria, 28 puntos porcentuales de depreciación de los salarios de las y los trabajadores lecheros, y que difícilmente o vayamos a recuperar de la noche a la mañana” agrego Ríos.
Luego el Secretario General se refirió a la situación diferencial que sufren los trabajadores lecheros en otras partes del país, asegurando que “la situación es sumamente grave, se han perdido una enorme cantidad de puestos de trabajo. Todos los días hay cierres de empresas lácteas”.
Para finalizar, Ríos afirmo con énfasis: “para que volvamos a hacer convocatorias por incrementos salariales y levantemos en forma unánime las manos aprobando el aumento salarial conformes, porque han cubierto las expectativas de cada uno de los trabajadores y trabajadoras, lo primero y principal que tenemos que hacer votar en agosto y en octubre la Formula Fernández – Fernández, para que el gobierno de Cambiemos llegue a su final de una vez por todas. Hay que entender que no hay solución gremial sin solución política”.
